El argentino Felipe Contepomi, el sudafricano Percy Montgomery el inglés Jonny Wilkinson y el Neozelandés Daniel Carter, son los francotiradores que perforan los palos y aportan puntos de oro para ilusionar a sus equipos en los cuartos de final de una Copa del Mundo en la que el pie manda.
En un juego fundamentalmente de manos, estos pateadores de precisión se destacan por desequilibrar a sus rivales con el pie, marcando penales, conversiones y drops, al igual que lo hacen muy bien el francés Juan - Baptiste Elissalde, el neozelandés Daniel Carter, el australiano Matt Giteau y el argentino Juan Hernandez.
Jonny Wilkinson entró en la historia del rugby al marcar el drop decisivo en la final de 2003 contra el anfitrión Australia (20 - 17), el mismo que le valió a los británicos la conquista de su primera trofeo mundialista.
En Francia 2007, tras perderse los dos primeros partidos por una lesión, Wilko, de 28 años, volvió para resucitar a su equipo, marcando 24 puntos contra Samoa y 16 ante Tonga, en un choque determinante, que se apoyó en su mágica zurda para encarrilarse hacia un desenlace favorable.
Wilkinson ese día se convirtió en el segundo máximo anotador de la historia, con 1.022 puntos. Pero el pateador afirmó: " No creo que sea el salvador de Inglaterra ", intentando dejar a un lado las estadísticas, aunque con 955 puntos en 62 presentaciones, su declaración pierde algo de sentido.
La Argentina, el plantel más sorprendente de este Mundial, practica algunos movimientos similares, con un Felipe Contepomi que se disfraza de Wilkinson.
" Por suerte estoy derecho con los palos y me tengo mucha confianza ", confiesa el apertura o centro del Leinster irlandés, autor de 11 puntos en la victoria ante Irlanda y sostenedor de un promedio de 80 por ciento de efectividad en sus disparos por penales.
Contepomi, de 30 años, hundió a Francia con 12 puntos en la victoria argentina en el inicio del torneo y luego siguió acertando, acumulando un total de 53 unidades en cuatro partidos, para quedar posicionado como el segundo máximo anotador del certamen en la primera fase.
El fullback sudafricano Percy Montgomery, quien disputa su segunda Copa del Mundo, tras perderse la de 2003 por militar en Gales en esa época, por ahora es el mejor en este rubro, con 67 puntos.
Con 820 puntos en su carrera con la casaca de los Springboks, que lo tiene como hombre récord también en ese rubro (90), el número 15 de los Sharks, de 33 años, mantiene un porcentaje muy alto de aciertos en sus tiros (100% en penales, 75 en conversiones), factor que tranquiliza muchísimo al técnico Jake White.
Si bien los All Blacks cuentan con un pateador de calidad como Daniel Carter, estrella en su país a los 25 años y heredero de la precisión del genial Grant Fox (anotador récord con 170 puntos, campeón mundial en 1987), la potencia de penetración del juego de manos neozelandés le pone menos presión.
El juego de Nueva Zelanda no se basa en él, aunque si lo necesitan, el apertura de los Crusaders - mejor jugador del mundo de 2005, según la IRB - siempre responde.
Carter llegó a esta Copa del Mundo con un récord de 636 puntos sobre un total de 41 compromisos.
2 comentarios:
Ya te añadi a mi lista de enlaces
Saludos
brother...sorry pero le falto chris Paterson de scocia y su compañero de equipo Dan Parks...estos jotes están 100% efetividad...sin guebeo
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